Respirar bien es una cuestión de salud. Normalmente respiramos de forma inconsciente, sin pararnos a pensar si lo estamos haciendo de una manera correcta.
Con una eficaz respiración, los procesos fisiológicos del cuerpo humano: sistema nervioso, glándulas, órganos y músculos, funcionan mejor. Ayuda a conseguir un sueño reparador cuando dormimos, a reducir los niveles de ansiedad gracias a la disminución del cortisol e incrementa las defensas internas. La respiración es, además, uno de los métodos depurativos más importantes de nuestro organismo, ya que con cada espiración éste se purifica expulsando toxinas y tensiones.
Importancia de respirar correctamente:
- Favorece el funcionamiento del sistema nervioso. El oxígeno que recibe el cerebro, la columna, los centros nerviosos y los nervios permite una buena relajación, comunicando este estado de sosiego a la mente y al cuerpo. Con una rutina de respiración lenta, profunda y rítmica podemos también calmar un corazón acelerado o reducir la ansiedad.
- Incrementa los glóbulos rojos. Aumento en la cantidad de sangre debido a su mayor oxigenación en los pulmones, favoreciendo la eliminación de toxinas.
- Mejora la capacidad del organismo para digerir y asimilar los alimentos, facilitando el tránsito intestinal y permitiendo un óptimo funcionamiento de los órganos abdominales debido a los movimientos de masaje del diafragma durante la respiración.
- Aporta mayor fuerza y salud a los pulmones. Una buena respiración aumenta la elasticidad de los pulmones y el tórax -favoreciendo su resistencia ante el esfuerzo-, mejora la capacidad pulmonar y protege al organismo de enfermedades respiratorias.
- Mantiene en buen estado a la glándula pituitaria, que controla las funciones de las demás glándulas y regenera sus células gracias a la correcta entrada de oxígeno. Es importante conservarla en condiciones apropiadas para evitar problemas hormonales de cualquier tipo.
- Reduce la carga de trabajo del corazón, consiguiendo un corazón más eficiente y fuerte, que funciona mejor y dura más tiempo. También se traduce en una tensión sanguínea reducida y una probabilidad menor de sufrir una enfermedad cardiaca.
Pero respirar bien no siempre es suficiente. Existen determinadas enfermedades que pueden tratarse con dispositivos médicos consiguiendo que el oxígeno llegue a través del torrente sanguíneo a las áreas donde hay deficiencias. La medicina hiperbárica, también conocida como oxigenoterapia hiperbárica, es el uso médico del oxígeno puro al 100% en una cámara presurizada, llamada cámara hiperbárica, que ayuda a tratar y mejorar una gran cantidad de patologías, como el pie diabético, quemaduras, injertos de piel, intoxicación por monóxido de carbono, síndrome de descompresión, sordera súbita y secuelas de tratamiento oncológicos, entre otras.