La conjuntivitis es la inflamación de una membrana transparente (la conjuntiva) que recubre y protege la parte blanca del ojo y el interior de los párpados.
Existen diferentes tipos de conjuntivitis, según sea la causa que la produce; un virus, una infección bacteriana o una reacción alérgica. A su vez, la conjuntivitis alérgica puede estar causada por diferentes alérgenos (ácaros del polvo, pelo de los animales, cosméticos…). La ocasionada por el polen es una de las más comunes y sus síntomas (picor, lagrimeo, visión borrosa, fotosensibilidad e hinchazón) se ven incrementados en primavera.
¿Cómo aliviar esta alergia ocular?
Este decálogo de consejos, recomendados por los especialistas de Clínica Baviera, puede ayudarnos a suavizar las molestias que produce la conjuntivitis alérgica:
- Determinar el alérgeno: se recomienda acudir al especialista (oftalmólogo y/o alergólogo) para determinar el alérgeno y establecer el tratamiento adecuado.
- No automedicarse: es habitual combatir este tipo de alergia con fármacos y colirios, pero estos siempre deben ser recetados por un especialista, dado que pueden agravar la patología si no son los adecuados.
- Evitar el contacto con el alérgeno: una vez identificada la sustancia causante de la alergia debemos evitarla en la medida de lo posible.
- Lavarse las manos con frecuencia y no frotarse los ojos: asimismo, es conveniente ducharse por la tarde para eliminar mejor los restos de polen.
- Mantener los ojos hidratados: es conveniente hidratar los ojos con lágrimas artificiales y, también, lavarlos por fuera con suero fisiológico.
- Usar gafas de sol: con ello se evita que el polen entre en los ojos y se disminuye el paso de la luz, en aquellos casos en los que se padece fotofobia.
- Cerrar las ventanas y utilizar aires acondicionados con filtro: con ello evitaremos la entrada de polen, tanto en casa como en el coche.
- Evitar las actividades al aire libre: principalmente durante las horas de mayor concentración de polen, sobre todo a primera hora de la mañana y a última de la tarde.
- No tender la ropa de la persona afectada al aire libre: el polen puede posarse en ella y empeorar los síntomas
- Tener especial cuidado los días de viento: los síntomas de la alergia se suelen incrementar en los días con viento, mientras que disminuyen en los días de lluvia.